Adultos No es necesario tener ningún problema o dificultad para acudir a terapia, existen muchas situaciones que pueden despertar en nosotros/as esa necesidad: querer conocernos mejor, buscar una guía para dar un paso importante a nivel personal o profesional, querer empezar un proceso de crecimiento personal, etc. En otras ocasiones sí que existe una preocupación que nos lleva a pedir ayuda y a trabajar algunos aspectos más concretos comoson la ansiedad, el estrés, la gestión de las emociones, bajo estado de ánimo, autoestima, habilidades sociales, adaptación a los cambios,duelo, etc.
Adolescentes Además de las dificultades anteriores, pueden necesitar ayuda para entender el momento evolutivo en el que se encuentran, trabajar la impulsividad y el autocontrol, desenvolverse en los grupos de iguales, gestionar redes sociales, proporcionar herramientas que contribuyan a una buena relación con sus padres y madres, etc.
Infantil En muchas ocasiones trabajando con las familias conseguimos cambios significativos sin necesidad de trabajar con el propio niño/a, como verás en el apartado del asesoramiento en crianza. Sin olvidar que cada niño/a es único/a y tiene su propio ritmo y necesidades, a veces sí que es necesaria una intervención diseñada específicamente para trabajar algún aspecto concreto que esté generando una interferencia real con su día a día(ansiedad, miedos, impulsividad, etc.)